lunes, 28 de abril de 2008

Los muchachos están creciendo.

Esperaba hacer mi reentré croniquil con los Danny Mellow en castellano, pero como para eso aún falta, y como yo ya he vuelto a asistir a conciertos, pues eso, que hago la crónica del último que fui a ver ¿no?

Los Lori Meyers estuvieron en el Greenspace el pasado jueves, y para deleite de nuestros oídos, el concierto fue un conciertAZO.
Con estos muchachos nunca me canso. Su último trabajo es grande. El otro día lo comentábamos… han dejado el pabellón muy alto para un próximo disco, que si es superado… nos mearemos todos encima cada vez que escuchemos alguna canción… ¿exagero?

Bueno, como ya sabíamos de antemano que si no te pones por delante, el sonido es absorbido por las telarañas del greenspace, nos colocamos cerquita del escenario. Raúl, Dori y yo misma.
Nos hicieron poco esperar, y sin más apagáronse las luces y aparecieron de repente. Noni, Alejandro, Alfredo y Sergio (definitivamente Julián ya no está, así que espero que dónde esté y con lo que esté haciendo, sea muy feliz)
Con ellos, dos muchachos más que perdonarme, pero no recuerdo sus nombres. Uno a las cuerdas y teclados y otro a la percusión. Osea, que Alfredo tenía un ayudante de batería (jaa!) Se situó a su lado en una más baja y con menos bombos, pero con infinidad de instrumentos de ruidillos varios.

Fueron presentando los nuevos temas del “Cronolánea”. Sin compasión, Copa para Dos, La búsqueda del rol, Cúmulo de propósitos, Luciérnagas y mariposas (¡qué bonita!). Noni presentó a Alejandro como cantante cuando interpretaron El secreto mejor guardado. También cantó Un mundo por delante y Saudade, canciones que él mismo ha compuesto para el disco.

Entre medias La mujer esponja, Tokio ya no nos quiere, El aprendiz, Dilema, de sus anteriores trabajos.
Con Transiberiano Noni se marcó un bailecito, y con Funcionará, se colgaron unos peluches de los teleñecos, anunciándonos que ya lo entenderíamos más tarde. El caso es que para el coro final de esta canción convirtieron el na-na-ná en la melodía de Barrio Sésamo. Entonces sí, …Epi, Blas, y Triqui tenía sentido que estuvieran allí je,je…
Se dejaron Luces de neón para el final (chulísima) y después pasaron al primer bis. Aquí se marcaron Saudade, Alta fidelidad (cañera), Viaje de estudios y la Pequeña muerte. En esta última tunearon el coro final con el Hey Jude de los Beatles, lo cual no es un hecho extraño ni inexplicable.

Las letras de las canciones son muy buenas. En general me parecen canciones bonitas, porque las adjetivaciones son cuidadas y no fáciles. Quiero decir que no vas a escuchar lo obvio p.e. en una canción de amor, lo que casi siempre se repite en temas así. Los símiles, metáforas y demás recursos estilísticos empleados para las canciones son buscados y encontrados con bastante acierto. Y para cualquier temática.

En cuanto a la interpretación de los instrumentos, decir que los muchachos están creciendo. Todos, tocan muy bien sus instrumentos, pero a mi parecer Alejandro es muy buen músico. En Copa para dos, seguro que el punteado de española lo toca él, y eso me recuerda que para Septiembre de 2006 tenía un examen de guitarra en el conservatorio. Seguro que lo pasó y con nota, aquí está la prueba.
Alfredo también ha mejorado mucho a la batería. Aun si hubiera tocado solo en el concierto, lo hubiera notado. Al principio pensaba que era el más flojo de todos, pero ya no lo pienso. Se está superando. Yo creo que todos tienen el cuidado de seguir aprendiendo con sus instrumentos, y eso está muy bien. Sobre todo a la hora del directo. Vaya chafón nos llevaríamos si los conciertos sonaran a rayos, y no sólo por culpa del sonido de la sala…

Lo malo del jueves pasado es que sólo tocaron una hora y veinte minutillos con bises y todo. Demasiado corto. Insisto: demasiado corto, pero bueno, nos fuimos contentos.
Saludarlos, pues ya los saludaremos en otra ocasión porque para esta no pudo ser.

Y nada más. Para cambiar de tema deciros que el Manuel ya no es un bebé, es un niño pequeño, pero no un bebé.
Y trasladando esta apreciación a los Lori Meyers, decir que estos chicos ya no son pequeños, ya son GRANDES. Escucharos el “Cronolánea” y seguro que estaréis conmigo.

Besetes para tod@s

Loula Mae